Los libros colocados uno al lado del otro queda fuera, ¡el movimiento es bienvenido! Coloca los libros al azar, algunos en vertical, otros en horizontal y en ángulo, sin colocarlos necesariamente unos encima de otros.
Una idea innovadora es también ordenar los libros según su color: crear un arco iris agrupando libros del mismo color y bajando la escala de colores.
Pero cuidado, decorar no significa necesariamente «llenar», así que no tengas miedo de dejar espacios vacíos.